EL Rincón de Yanka: CÓMO TRATAR A LA GENTE E INTEGRARLA EN LA COMUNIDAD: ACOGIDA ECLESIAL: ÁGAPE

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lunes, 23 de septiembre de 2013

CÓMO TRATAR A LA GENTE E INTEGRARLA EN LA COMUNIDAD: ACOGIDA ECLESIAL: ÁGAPE


El Papa Francisco indicó que “en el camino, muchas veces difícil, no estamos solos, somos tantos, somos un pueblo, y la mirada de la Virgen, nos ayuda a mirarnos entre nosotros de modo fraterno”.


“¡Mirémonos de un modo más fraterno! María nos enseña a tener esa mirada que busca acoger, acompañar, proteger. ¡Aprendamos a mirarnos, los unos a los otros, bajo la mirada materna de María! Hay personas que instintivamente no tenemos en cuenta, y que sin embargo tienen más necesidad: Los más abandonados, los enfermos, aquellos que no tienen de qué vivir, aquellos que no conocen a Jesús, los jóvenes que están en dificultad, que no tienen trabajo”.




Cómo tratar a la gente 
e integrarla en la comunidad



1 - La acogida es algo central. Con ella mostramos nuestra caridad y diaconía. La acogida incluye tener capacidad de escucha, mostrar gratuidad y ofrecernos con disponibilidad. Sin esto, no somos acogedores.


2- La escucha de las demandas de los fieles. "Unos vienen pidiendo sacramentos, exequias, etc… Otros sólo quieren la catequesis de los niños. Otros tienen cierta religiosidad: quieren bendecir objetos. Otros quieren ayudas materiales. Otros sólo necesitan hablar con alguien. Hay que ver cómo evangelizar cada una de esas demandas. A menudo en las parroquias sólo creamos actividades para los muy habituales, no proponemos nada a estas personas que vienen buscando otras cosas". 

3- Atender el itinerario de la persona. "Implica personalizar las relaciones, saber que cada uno está en una etapa o en un camino distinto . Hay métodos que dan resultado, cosas ya probadas. Por ejemplo, los Cursos Alpha, con una comida y testimonios y lenguaje accesible, no recitando el Catecismo. Son 8 ó 10 sesiones. También funcionan las células de evangelización parroquial: pequeñas células en casas, abiertas a gente que no iría a la iglesia pero que son invitadas a esta reunión semanal en la casa. Tenemos una parroquia con decenas de células. Se pueden crear también círculos bíblicos, comunidades y movimientos de pequeña fraternidad, etc… No basta con decir: “¿quiere ser cristiano?, pues vaya a misa”. Está bien ir a misa pero mucha gente no hará eso por sí sola.

4- Los círculos de compromiso. Hay que reconocer los cuatro tipos de trato que alguien tiene con la iglesia.

-el parroquiano ordinario y practicante
-el de temporada: va si no llueve, son intermitentes
-los de misas, bautizos y comuniones
-los que no tienen ningún contacto con la iglesia.

Y hay que desarrollar formas de llegar a todos ellos y aumentar su fe, formación y compromiso.

5 - Acoger los dones, carismas y capacidades de cada fiel. "El pastor debe ayudar a cada uno a desplegar sus carismas para que crezcan en fe y se vayan integrando en la comunidad. Al recién llegado o alejado hay que inscribirlo en una pequeña comunidad o grupo adecuado para él con un camino de iniciación cristiana que le de un autentico encuentro con Cristo. Es una estructura pequeña personalizadora, que permite lo espontáneo, como es, por ejemplo, la oración en un grupo pequeño". Un cura no puede acompañar personalmente a 300 personas, no puede ser director espiritual cercano y disponible para todos. Basta con un acompañamiento por alguien con sentido común y algo de formación, cosas muy básicas pero en acompañamiento personalizado. 

6 - Formación continua: para clero, laicos, feligreses...

7 -Participación: "hagamos cosas juntos, movamos a la gente, que no sea pasiva, receptora, que usen sus capacidades".

8 -Momentos para proclamar la fe y el Credo; explícitamente. "Sí, lo hacemos en la Eucaristía dominical, pero hay que expresarlo en más momentos. En Toulon hemos bajado la edad de confirmación: antes era con 15 años; ahora con 10 o 11. Pedimos que sea la comunidad la que establezca momentos para profesar su fe ante todos, en voz alta: durante una peregrinación en Lourdes, por ejemplo. Hacemos que proclamen el Credo en público, como en la Vigilia Pascual, ante los hermanos".


Dominique Rey también respondió 
algunas preguntas de los asistentes.

Sobre evangelizar a inmigrantes y musulmanes

"Tenemos comunidades cristianas evangelizadoras de Brasil, Chile, Colombia, etc… nos ayudan a evangelizar a los inmigrantes de esos países en nuestra diócesis. También tenemos unos pocos musulmanes conversos. Y un seminarista que viene del protestantismo. En Toulon, el 15% de los habitantes ya son musulmanes. Nuestro método con ellos es: caridad y coherencia de vida, y proponer la inteligencia de la Fe, proponer la razón y la sabiduría. Hay musulmanes que impresionados por la caridad reflexionan sobre el cristianismo y entonces ven su razonabilidad. Tengo una comunidad que trabaja la presencia directa entre musulmanes. Es arduo, no tenemos decenas de conversiones. Pero ya pasan cosas: cada año tenemos 8 o 10 musulmanes que se convierten. Y bautismos en clandestinidad, en secreto, por miedo a la persecución familiar.

Sobre la adoración evangelizadora 

"La experiencia demuestra que donde hay adoración permanente se genera evangelización. Hay que buscar la fórmula pastoral para ello: que se rece en la adoración por la evangelización de la parroquia, por el apostolado. Los mismo adoradores generan fecundidad misionera. Están, por ejemplo, los Misioneros de la Santísima Eucaristía, que el padre Justo, entre Francia y España, promueve".

Sobre "el puerta a puerta" eficaz: ¡rezando!

"A veces yo mismo salgo a la calle, a evangelizar. O voy puerta a puerta. Pero todo empieza antes, ¡con la oración personal y con la conversión permanente! Eso crea el estado de ánimo que hace que los cristianos sean creíbles y audibles".

Sobre los cristianos en la política

"El cristiano por definición debe estar comprometido con la política en el sentido noble del término. El gobierno de la urbe debe buscar la solidaridad, la subsidiariedad, la defensa de la vida y dignidad humana desde la concepción hasta la muerte. En Toulon hemos lanzado un observatorio sociopolítico para forma la conciencia de los cristianos. Intentamosdar voz a la Iglesia en los medios de comunicación, ahora contra el matrimonio homosexual y la entrega de niños a parejas del mismo sexo. El compromiso político es fundamental en este momento histórico en que se cuestionan cosas básicas". 

Sobre las zonas rurales y los cristianos muy dispersos

"En nuestra diócesis tenemos pueblecitos al norte de 300 habitantes y menos, y además son socialistas, radicales. Son parroquias demasiado pequeñas, el cura solo no puede. Hay que unir allí a los cristianos en torno a monasterios y comunidades. En un clima de desertificación, una comunidad de vida y oración, de tipo monástico o similar, puede dar aliento a los cristianos. Los curas diocesanos nos dicen que para ellos es fundamental poder alimentarse también ellos en este terreno pastoral tan ingrato y árido. Si la parroquia es muy pequeña, creamos también “polos misionales”, un trabajo colectivo donde los curas trabajen y reflexionen juntos". 

Sobre el papel de los nuevos movimientos y comunidades

"Tenemos unas 50 comunidades nuevas en Toulon, algunas más monásticas, otras carismáticas, otras de espiritualidades más clásicas. Y todas ayudan muchísimo a revitalizar la diócesis. Cada año ordenamos a 8 o 10 sacerdotes y la mitad son de alguna de esas comunidades. Antes de acogerlas hay que verificar la autenticidad del carisma, ayudarles a madurar, a integrarse en un territorio concreto, que no estén solos sin conectarse los demás. Los carismas no se yuxtaponen, no han de estar sin contacto: no, al contrario, deben tratarse y colaborar. Si una comunidad solo ayuda a sus miembros es que eso no es eclesial, es que no están al servicio del evangelio. En el seminario todos aprenden a respetarse, conociéndose. Así, han de funcionar como una sinfonía".


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Nuevos movimientos, grupos pequeños, itinerarios de acogida, mucha escucha, salir a la calle, una conversión pastoral completa... así es una diócesis de Nueva Evangelización.